Hace unos meses comenzó la construcción de la Casa Maryvilla, uno de los proyectos más emocionantes del estudio: .
Esta casa, situada en un enclave extraordinario con unas vistas panorámicas de Calpe, emerge de lo alto del Morro de Toix, en la urbanización Maryvilla, creando un accidente geográfico que se adapta a la pronunciada pendiente de la parcela y se mimetiza con el paisaje en el que se ubica mediante una cubierta verde de plantas autóctonas que crecen de manera natural en los alrededores de la parcela. Pero para lograr que esta cubierta verde quede a la cota del terreno y que la vegetación se extienda de manera natural, de la montaña a la cubierta de la casa, la totalidad de la vivienda debe situarse en cotas bajo rasante. Esta situación nos exige realizar una compleja excavación para llegar a la cota de cimentación de la planta sótano.
Uno de los mayores condicionantes a la hora de realizar esta excavación, además de la propia pendiente de la parcela, es el acceso desde la parte superior, ya que supone un reto para la maquinaria descender por una pendiente tan pronunciada para luego ascender con la carga hasta la cota superior. De modo que para realizar la excavación, se ha creado una primera plataforma de trabajo en la cota de apoyo de la cimentación de la planta de invitados.
Desde esta primera plataforma de trabajo se ha ejecutado una pantalla de micropilotes de hormigón que se introducen en el terreno hasta alcanzar el estrato resistente del mismo. Este tipo de cimentaciones se utiliza para poder realizar excavaciones en vertical sin necesidad de apeos, ya que los micropilotes contienen el terreno que queda detrás de ellos.
Una vez se han ejecutado los micropilotes hasta el estrato más resistente del terreno, se introducen unos tensores en sentido horizontal y se unen todos los elementos (micropilotes y anclajes) con unas vigas metálicas, de manera que todo el sistema funcione de manera conjunta como un apantallamiento del terreno.
En las últimas semanas de obra se ha comenzado a picar y extraer la tierra que queda a partir de este muro de micropilotes, para realizar una excavación en vertical de más de 10 metros de profundidad, hasta llegar hasta la cota de cimentación de la planta sótano. Como podéis ver en estas últimas fotografías, ya se empieza a ver la huella de la Casa Maryvilla en el terreno, distinguiéndose la planta superior, donde se encuentra la habitación de invitados, de las plantas inferiores, donde están el resto de espacios de la vivienda.